¿Los judíos ashkenazis son más inteligentes?

¿Por qué el coeficiente intelectual de los judíos ashkenazi es tan alto? - Veinte posibles explicaciones. Por Hank Pellissier Los judíos ashkenazi son inteligentes. En general asombrosamente brillantes,. Impresionantes en capacidad mental. ¿Cómo lo lograron?

Los judíos ashkenazi, también conocido como askenazíes, son los descendientes de los judíos de Alsacia medieval y del valle del Rin y, más tarde, de toda Europa Oriental. Originalmente, por supuesto, eran de Israel. La investigación genética de la Escuela de Medicina Albert Einstein sugiere que el linaje asquenazí es una ramificación, hace 2.500 años, de otros grupos judíos de Israel, y que el 40% de ellos son descendientes de sólo cuatro madres judías. Aproximadamente el 80% de los Judíos del mundo de hoy son askenazíes, y el resto principalmente sefardí.

Los investigadores que estudian a los askenazíes están de acuerdo en que los hijos de Abraham están en la parte superior de la tabla de coeficiente intelectual. Steven Pinker – que, en 2007, pronunció una conferencia sobre "Los Judíos, los Genes y la Inteligencia" - dice que "Su coeficiente intelectual promedio se ha medido en 108-115". Richard Lynn, autor de "La Inteligencia de los Judíos de Estados Unidos" de 2004, dice que es "sólo" un poco más alto que el promedio: 107,5. Henry Harpending, Jason Hardy y Gregory Cochran, autores del informe de investigación de 2005 de la Universidad de Utah, "Historia Natural de la Inteligencia de los Ashkenazi", afirma que sus sujetos, "marcan desviaciones estándar de 0,75 a 1,0 por encima de la media general europea, que corresponde a un coeficiente intelectual de 112 a 115”. Charles Murray, en su ensayo de 2007 "El Genio Judío", dice "su promedio está en algún lugar en el rango de 107 a 115, siendo 110 un plausible valor".

Un coeficiente intelectual judío promedio de 115 es 8 puntos mayor que el coeficiente intelectual generalmente aceptado de sus más cercanos rivales – los asiáticos nororientales - y aproximadamente 40% más alto que el coeficiente intelectual promedio mundial de 79,1 calculado por Richard Lynn y Tatu Vanhanen en Coeficiente intelectual e Inequidad Global.

Además, considérese esta sorprendente perlita: las puntuaciones del coeficiente intelectual ashkenazi "visual-espacial" son sólo mediocres; en un estudio su promedio en esta categoría estuvo por debajo del promedio 98. Superan esta predisposición llegando a cifras astronómicas en "coeficiente intelectual verbal", que incluye razonamiento verbal, comprensión, memoria de trabajo y habilidad matemática; una encuesta de 1958 de estudiantes de yeshiva encontró un coeficiente intelectual verbal promedio de 125,6.

¿Qué significa que los askenazíes tienen un alto coeficiente intelectual, en términos de producción de "genios"? Con su población tan pequeña - un mero 0,25% del total mundial - ¿hace alguna importante diferencia? La respuesta es SÍ. Se utiliza una "curva de campana" [curva de Gauss] para ilustrar el percentil del índice de inteligencia en un grupo específico - en una "población general", donde el coeficiente intelectual promedio es 100, la curva asume estas proporciones:

Coeficiente intelectual menor de 70 - 2,5%

Coeficiente intelectual entre 70 y 85 - 12.5%

Coeficiente intelectual entre 86 y 100 - 35%

Coeficiente intelectual entre 101 y 115 - 35%

Coeficiente intelectual entre 116 y 130 - 12.5%

Coeficiente intelectual mayor de 130 - 2,5%

Aplicando la misma curva de campana para los ashkenazim, pero con un incremento de 17 puntos en el coeficiente intelectual promedio (usando la cifra de De La Oportunidad a la Elección) se obtiene el coeficiente Intelectual modificado a continuación:

Coeficiente intelectual menor de 87 - 2,5%

Coeficiente intelectual entre 88 y 102 - 12.5%

Coeficiente intelectual entre 103 - 117 - 35%

Coeficiente intelectual entre 118 y 132 - 35%

Coeficiente intelectual entre 133 y 148 - 12.5%

Coeficiente intelectual mayor que 148 - 2,5%

Este desplazamiento hacia arriba de la curva de campana por más de una desviación estándar (15 puntos) significa que los ashkenazim son, más de cinco veces, elegibles para Mensa (coeficiente intelectual mínimo 130) y tienen, más de cinco veces, el coeficiente intelectual promedio de un graduado de la Ivy League.

En realidad, los askenazíes están matriculados en la Ivy League en una proporción diez veces mayor que su número; por ejemplo representan el 30% de los estudiantes de Yale, el 27% de Harvard, el 23% de Brown, el 32% de Columbia, y el 31% de Pennsylvania.

 

Esto sugiere que, o bien la "curva de campana" fue levantada un poco más para los Ashkenazi en la parte alta o hay factores adicionales que mejoran su aptitud para tener éxito. En cuanto a la primera posibilidad, Charles Murray señala que "la proporción de judíos con un coeficiente intelectual de 140 o mayor es de alrededor de seis veces la proporción de todos los demás". Harpending, Hardy y Cochran tienen más o menos la misma ecuación; "4 de cada 1.000 europeos del norte tienen un coeficiente intelectual mayor de 140, pero 23 de cada 1.000 judíos tienen 140 o más". Murray también transmite un informe de la parte alta, en el rango de genio, cuando señala que una encuesta de 1954 de los niños de las escuelas públicas de Nueva York con coeficiente Intelectual mayor de 170 reveló que 24 de los 28 eran judíos.

Ahora que he establecido que los ashkenazi tienen coeficientes intelectuales superlativos, veamos lo que han logrado con sus cerebros altamente funcionales.

En el siglo XIX, Mark Twain señaló que:

[Los judíos] son peculiar y conspicuamente la aristocracia intelectual del mundo... las contribuciones [judías] a la lista mundial de los grandes nombres de la literatura, la ciencia, el arte, la música, las finanzas, la medicina y los estudios abstrusos, están muy fuera de proporción respecto de la flaqueza de su cantidad. Han luchado maravillosamente en este mundo... y lo han hecho con las manos atadas a la espalda.

El comentario de Twain no está fechado. Después de su declaración, los judíos ashkenazi continuaron superando mentalmente otros datos demográficos, a menudo sufriendo terribles consecuencias por su trabajo. He aquí una breve lista de logros ashkenazi en los últimos 90 años.

Premios Nobel: Desde 1950, el 29% de los premios han sido para ashkenazim, a pesar de que representan sólo una pequeña fracción de la humanidad. Los logros ashkenazi en esta área son 117 veces mayores que su porcentaje en la población. Este ritmo no se está desacelerando; se está acelerando. En el siglo XXI, han recibido el 32% del total, y en 2011, cinco de los trece ganadores del Premio Nobel fueron judíos - 38,5%.

Hungría en la década de 1930: Los askenazíes eran el 6% de la población, pero componían el 55,7% de los médicos, el 49,2% de los abogados, el 30,4% de los ingenieros y el 59,4% de los funcionarios de bancos; además eran dueños del 49,4% de la industria metalúrgica, del 41,6% de las fábricas de maquinaria, del 72,8% de la fabricación de prendas de vestir, y, como propietarios de viviendas, recibían el 45,1% de los ingresos por alquiler de Budapest. Los judíos eran similarmente exitosos en los países vecinos, como Polonia y Alemania.

"Cifras significativas": En "El Genio Judío", de Charles Murray, el autor hace un recuento de personas importantes que contribuyen en una variedad de vocaciones, observando cuán inmensamente sobre representados están los judíos, comparado con lo que podría esperarse debido a su escasa población. Su conclusión, en diversas categorías es: Biología - judíos "significativos" aparecen multiplicando por 5 el porcentaje de su población, Química por 6, Física por 9, Literatura por 4, Música por 5, Artes Visuales por 5, Matemáticas por 12, Filosofía por 14.2

EE.UU. (hoy): Los judíos ashkenazi comprenden el 2,2% de la población de EE.UU., pero representan el 30% de los profesores en las universidades de élite, el 21% de los estudiantes de la Ivy League y el 25% de los ganadores del Premio Turing. Además, "Los judíos son más del 50% de los doscientos principales intelectuales... el 40% de los socios en las principales firmas de abogados de Nueva York y Washington... el 59% de los directores, escritores y productores de las cincuenta películas más taquilleras…"

Israel: En el año 1922 estas pantanosas y desérticas tierras tenían una población empobrecida de 752.000 habitantes. Hoy en día hay 7.746.000 habitantes, con una gran población ashkenazi (3 millones y el 60% de la fuerza laboral) que han elevado a Israel a una nación emprendedora de alta tecnología con el mayor ingreso per cápita de la región. Israel está primero en el mundo en estudios de postgrado, 1o en museos, 1o en computadoras personales, y 1o en publicación de artículos científicos.

Personalmente, creo que la estadística del Premio Nobel es la más asombrosa. Considere esto: si todo el mundo en el planeta fuera judío ashkenazi, el resultado sería que habría 117 veces más individuos de la envergadura de ganador del Premio Nobel, con 117 veces más de logros espectaculares, ¿por año? ¡SINGULARIDAD INSTANTÁNEA! Sin ninguna ayuda de Inteligencia Artificial...

Los logros judíos sefardíes están representados en muchas de las categorías anteriores, especialmente en las estadísticas del Premio Nobel. Cuando este artículo fue publicado inicialmente - en una versión más corta, el 7 de agosto de 2011, por el Instituto para la Ética en la Tecnología Emergente (ieet.org) – los judíos sefardíes expresaron cierta perturbación porque fueron omitidos en el ensayo. Con esta demasiada breve lista de notables de su linaje, me gustaría reconocer la inmensa contribución de los judíos sefardíes:

Elias Canetti (Premio Nobel de Literatura, 1981), Tobias Michael Carel Asser (Premio Nobel de la Paz, 1911), Rene Cassin (Premio Nobel de la Paz, 1968), Franco Modigliani (Premio Nobel de Economía, 1985), Francois Jacob (Premio Nobel de Medicina/Fisiología, 1965), Salvador Luria (Premio Nobel de Medicina/Fisiología, 1969), Baruj Benacerraf (Premio Nobel en Medicina/Fisiología, 1980), Rita Levi-Montalcini (Premio Nobel de Medicina/Fisiología, 1986), Emilio Segre (Premio Nobel de Física, 1959), Claude Cohen-Tannoudj (Premio Nobel de Física, 1997), además del filósofo Jacques Derrida, el economista/filántropo Bernard Baruch, el pintor Amedeo Modigliani, y Benjamin Disraeli, el Primer Ministro Británico.

En la época medieval, los logros sefardíes fueron también bastante significativos. En la Introducción a la Historia de la Ciencia, de George Sarton, el autor señala que 95 de entre 626 científicos del mundo, entre 1150 y 1300, fueron judíos sefarditas - 15% - muy por encima de su proporción en la población.

Sin embargo, cuando en la actualidad se registra el coeficiente intelectual sefardí, las sumas no son más altas que la media del norte europeo, y definitivamente no son tan elevadas como las de los ashkenazi.

Prosigamos. Con los hechos que he presentado, sólo el lector más obtuso puede oponerse a mi dictamen de que los judíos ashkenazi son, en promedio, extraordinariamente inteligentes. No estoy reivindicando la especificidad cognitiva ashkenazi porque soy filo-semita, o sionista, o pro-israelí. Lo señalo porque es una verdad irrefutable.

Dicho esto, la pregunta que mi ensayo trata de desentrañar es... ¿Por qué? ¿Por qué el coeficiente intelectual de los judíos ashkenazi es tan alto? ¿Es debido a su genética, al medio ambiente, a la cultura, a la educación, o a una singular combinación de múltiples factores?

En mi primera publicación de este ensayo, proporcioné ocho razones para el elevado coeficiente intelectual ashkenazi. Pero entonces, recibí un aluvión de sugerencias por correo electrónico (muchas de profesores) brindándome información adicional. En este ensayo ampliado, están ahora enumeradas veinte teorías, y he tratado de dar a mis fuentes el crédito que merecen, a pesar de que - en varios casos - no tengo sus nombres reales, sólo sus apodos de chat de Internet. Aquí está mi nueva lista - muchas relacionados entre sí – presentada aproximadamente en orden cronológico:

Eugenesia babilónica - En el año 586 AEC, Jerusalén fue totalmente destruida por los babilonios, encabezados por su monarca Nabucodonosor, que "llevaron al exilio... a todos los funcionarios y combatientes, y a todos los hombres con oficio y artesanos [judíos]... sólo quedaron los más pobres del país" (Reyes 24:10-14). Los Indestructibles Judíos, de Max Dimont, define a los deportados como "la flor de la aristocracia y los intelectuales de Judea".

Los judíos exiliados de esta primera diáspora se convirtieron en altamente exitosos en Babilonia. Dimont afirma: "En las bibliotecas de Babilonia, los intelectuales judíos encontraron un nuevo mundo de nuevas ideas. En cinco décadas, los judíos exiliados se mecían en la superficie de los niveles más altos de la sociedad babilónica, en empresas de negocios, en el mundo académico, en los círculos de la corte. Se convirtieron en líderes en el comercio, en hombres del saber, en asesores de reyes".

En el año 538 AEC, el rey persa Ciro el Grande concedió el permiso para que los judíos regresaran a su tierra natal. Judíos ricos - que habían establecido rutas comerciales exitosas y empresas en Babilonia – financiaron a los fervientes repatriados que querían volver a asentarse en Judea. Los primeros intentos fracasaron pero, con el tiempo, 1.760 colonos dirigidos por el profeta Ezra y el gobernador Nehemías reconstruyeron el muro de Jerusalén y resucitaron la nación. Estos judíos "babilonios" que regresaron a Israel descubrieron que sus hermanos más pobres, que hacía medio siglo se habían quedado, se habían escurrido hacia la asimilación, esfumándose en los credos paganos vecinos. Cyril Darlington, en su libro La Evolución del Hombre y la Sociedad, sugiere que la separación temporaria de la elite judía, y la remoción permanente de las personas sin educación y no calificadas, proporcionaron un impulso genético intelectual al judaísmo.

Los judíos que regresaron instituyeron también dos costumbres que mejoraron la solidez mental del futuro de su cultura. Se hizo cumplir la prohibición de los matrimonios mixtos con gentiles, y los primeros cinco libros de Moisés fueron canonizados como la Torá.

Pueblo del Complejo Libro: La Torá (los cinco primeros libros de la Biblia judía) y el Talmud (registros de discusiones rabínicas) son intelectualmente complejos y sofisticados. Se requiere de los practicantes del judaísmo que aprendan y estudien las extensas y mentalmente rigurosas leyes. El contenido temático de los pasajes de las Escrituras no es simplista o literal, está, por el contrario, diseñado para la comprensión en múltiples, metafóricos y abstractos niveles. La fe ciega y la devoción servil, alentada por otras religiones, no es conducente para el judaísmo. En cambio, el culto en el antiguo monoteísmo exige habilidades de alfabetización significativas debido a las demandas cognitivas de los textos, con una tradición que sostiene que la comprensión del Talmud exige "estudiar siete horas diarias durante siete años". Charles Murray señala que "ninguna otra religión demanda tanto de todo el conjunto de sus creyentes", con el consiguiente comentario que "el judaísmo evolucionó de tal manera que ser un buen judío significaba que un hombre tenía que ser inteligente".

Higiene y Dieta Saludable:ElProfesor Sam Lehman-Wilzig de la Universidad Bar-Ilan de Israel me proporcionó esta teoría. Su sugerencia se basa en el hecho de que - debido a sus prácticas habituales - los judíos probablemente disfrutaron de una mejor higiene que los gentiles. Señala el lavado de las manos judío antes de cada comida, el baño de los hombres por lo menos una vez a la semana en la "mikve" (una casa de baños de purificación), y el baño de las mujeres por lo menos una vez al mes, después del fin de su menstruación. También señala que la restricción a la carne de cerdo impidió que los judíos contrajeran triquinosis. (Víctimas famosas de esta enfermedad parasitaria incluyen a Gautama Buda y Wolfgang Mozart). Con menores tasas de enfermedades, los cuerpos judíos no habrían sufrido tanto como los cuerpos gentiles y esto habría mejorado sus capacidades mentales.

Esta noción se ha reiterado en otro lugar. En 1953, la investigación del farmacólogo de la Universidad Johns Hopkins, David I. Macht supuso que todas las decenas de artículos cárneos prohibidos por las leyes dietéticas judías en Deuteronomio y Levítico son, de hecho, más perjudiciales que la carne kosher, que estaba permitida. Además, en el último libro de la Supervivencia de los Más Enfermos, el escritor Sharon Moalem sugiere que los judíos, quitando toda la levadura de sus casas durante Pesaj, ayudaron a mantener fuera a las ratas que propagaron la peste bubónica en el siglo XIII. Por último, pero no menos importante, los judíos ashkenazi ricos de Europa oriental que habitaban en casas más grandes, habrían sobrevivido epidemias más fácilmente porque no sufrieron la misma alta tasa de infección múltiple que se producía en casas más pequeñas con mayor hacinamiento.

La amplia correlación entre un alto coeficiente intelectual y dieta sana, enfermedades infecciosas, sanidad y hacinamiento hogareño, es examinada a través de estudios de investigación, en los últimos capítulos de este libro, particularmente en "Primeros Años".

Énfasis en la Educación Desde AEC - Jeremías Unterman de Jerusalén me informó que la Torá ordena a cada padre judío enseñar la Torá a sus hijos, y Marisa Landau señala, en una discusión en futurepundit.com del 4/06/05, que la religión judía prohibe mantener analfabetos a los niños. Además, Landau informa que las mujeres judías aprendían a leer y escribir, un fenómeno que era único en el mundo antiguo. Landau menciona también que había una vieja costumbre entre los judíos, la de proporcionar una pensión completa - de hasta 10 años - a un yerno inteligente que deseaba dedicarse por completo al estudio. Los judíos, parece, inventaron la noción de "becas".

En la época medieval, el monje francés Pedro Abelardo (1079-1142) escribió esto acerca de la educación judía: "Un Judío, por más pobre que sea, aunque tenga diez hijos, les dará instrucción, no por ganancia como hacen los cristianos, sino para la comprensión de la ley de Dios. Y no sólo a sus hijos, también a sus hijas”.

Escuelas Obligatorias Para Varones - En el año 64 AEC, el sumo sacerdote Josué ben Gamla emitió e implementó una ordenanza obligando a la escolaridad para todos los niños a partir de los 6 años. En 100 años, los judíos habían establecido la alfabetización universal masculina y la aritmética, la primera etnia en la historia en lograr esto.

El progresista y exigente edicto produjo un enorme cambio demográfico. El a menudo prohibitivo costo de educar a los niños, en la economía de subsistencia agrícola de los siglos II al IV, motivó que numerosos judíos se convirtieran voluntariamente al cristianismo, lo que llevó a una disminución de la población judía de 4.500.000 a 1.200.000.

La "eugenesia" natural favoreció a dos grupos por esta situación: 1) a los hijos de los ricos, aparentemente judíos más inteligentes, que podrían proporcionar una mayor financiación para las escuelas que mantuvieron a su prole como judíos, y, 2) a los chicos más inteligentes que podrían aprender rápidamente a leer, escribir y aritmética a un ritmo en el que podían permitirse "permanecer judíos".

¿Quién quedó fuera? ¿Fuera del acervo genético? Respuesta: los más pobres, judíos sin educación, y/o aquellos con el más bajo coeficiente intelectual.

Ascenso a la Categoría Urbana – En el siglo I DEC el 80-90% de los judíos eran agricultores. Pero, para el año 1000 DEC, sólo el 10-20% se mantuvo en la agricultura. La educación requerida por la ordenanza de Joshua ben Gamla proveyó de habilidades verbales y matemáticas a los niños judíos, permitiéndoles salir de la vida rural de subsistencia hacia las profesiones urbanas altamente calificadas, implicando ventas, comercio y transacciones financieras.

Pasar de un entorno pastoral a las ciudades pone en marcha un impulso del coeficiente intelectual, debido al aumento de la complejidad, la alfabetización y la tecnología del urbanismo. Un estudio de la Universidad Nacional de Hanoi de 2006 mostró una enorme diferencia de 19,4 puntos del coeficiente intelectual entre estudiantes de la ciudad y del campo. Una encuesta de 1970 en Grecia registró una diferencia de 10 a 13 puntos. Otros estudios señalan diferencias más pequeñas de sólo 2-6 puntos, pero en todos los casos, los residentes urbanos siempre obtienen mejores calificaciones, y los judíos son una de las etnias más largamente urbanizadas del mundo.

Dialéctica y Pensamiento Racional – El Dr. Sam Lehman-Wilzig me informó que uno de los enfoques del aprendizaje judío digno de mención es la "dialéctica". El Talmud en sí no es un "código legal", sino un enorme compendio de DISCUSIONES. Los judíos son estimulados a ver un problema con diferentes perspectivas y se les enseña a cuestionar todo, incluida la Ley, la lógica del rabino, y el propio sistema de creencias. Los rabinos desarrollaron principios argumentativos, todo un sistema de cuestionamiento que los judíos han utilizado durante 2.000 años, tanto en debates religiosos como seculares.

La dialéctica no fue un invento "judío": Fue una técnica de aprendizaje que los judíos tomaron prestada y adaptaron de la filosofía griega; la síntesis es una 'metodología socrática judía'. Las huellas de la influencia griega son evidentes en el Seder de Pesaj, en el que el padre judío está reclinado sobre una almohada (similar a los griegos), mientras que el niño judío más joven hace Cuatro Preguntas. Este método de aprendizaje fue único en la Edad Media, en comparación con las tradiciones 'autoritarias' de la Europa católica.

El Dr. Sanford Aranoff, Profesor de Ciencias y Matemáticas de la Universidad Rider, me transmitió un mensaje similar. En su opinión, el judaísmo se basa en los principios del pensamiento racional. (El pensamiento racional comienza con principios claramente establecidos, continúa con deducciones lógicas, y luego examina la evidencia empírica para modificar, posiblemente, los principios).

Las habilidades analíticas y estratégicas desarrolladas, tanto por la dialéctica judía como por el pensamiento crítico, son un componente importante de los test de coeficiente intelectual, y son esenciales en las carreras jurídicas, académicas, científicas y de ingeniería.

Los Clérigos Inteligentes Procrean: Una importante diferencia entre el catolicismo y el judaísmo es que los sacerdotes han sido célibes desde que el Concilio de Cartago del siglo cuarto decretó que se abstengan de las relaciones conyugales, mientras que los rabinos judíos siempre han sido alentados a casarse y multiplicarse. En la Edad Media esto dio lugar a la depresión masiva del coeficiente intelectual de los católicos, porque sus chicos más brillantes y académicamente dotados eran usualmente encerrados en seminarios que desperdiciaban su acervo genético. Mientras tanto... los doctos y escolásticos rabinos judíos se casaban con mujeres inteligentes y creaban grandes e inteligentes familias. Tres volúmenes que analizan este fenómeno son Anarquía, Estado y Utopía de Robert Novick, La Mística Judía de Ernst Vandenberg, y Una Historia de los Judíos de Paul Johnson.

Procrear Cerebros:

"Nuestros rabinos enseñan, Permítasele a un hombre que venda todo lo que tiene y se case con la hija de un hombre culto. Si no puede encontrar a la hija de un hombre culto, permítasele casarse con la hija de uno de los grandes hombres de su época. Si no encuentra una así, permítasele casarse con la hija de uno de los dirigentes de la congregación, o, en su defecto, con la hija de un recaudador de la caridad, o incluso con la hija de un maestro de escuela; pero no se le permita casarse con la hija de un analfabeto, porque los ignorantes son una abominación, como también sus esposas y sus hijas". P'sachim, fol. 49, col. 2.

Textos judaicos como el de arriba enfatizan reiteradamente que el conocimiento y la inteligencia son virtudes supremas, siendo la ignorancia el lastre más grosero. Siguiendo esta máxima, los judíos mejoraron su acervo genético para la inteligencia. En Una Historia de los Judíos, el escritor Paul Johnson señala que, "entre los judíos las personas más inteligentes siempre han sido muy valoradas y buscadas como esposos, de modo que procrearan y difundieran sus buenos genes". Charles Murray observó otra tendencia en la formación de parejas, cuando señala que "al casar a hijos de estudiosos con hijos de comerciantes exitosos, los judíos estaban, prácticamente, uniendo a los seleccionados por la capacidad de razonamiento abstracto con los seleccionados por la inteligencia práctica".

 

Mientras tanto, los católicos se casaban por razones "de clase", inclinándose por ganancias aristocráticas de sangre azul que no tenían ningún vínculo con la inteligencia. También se deseaba la fuerza física y el valor de valientes caballeros en el campo de batalla - esta exaltación del músculo sobre el cerebro, igualmente, no hizo nada para incrementar el coeficiente intelectual colectivo de esa religión.

Idiomas del Comercio: Los comerciantes Ashkenazi difundían sus mercancías sobre una vasta área, originalmente en las regiones islámicas, pero más tarde internacionalmente – desde el caucho de Brasil hasta la seda de China. Para prosperar en el intercambio, memorizaban múltiples idiomas. La tribu sin estado, de todos modos, necesitaba variada fluidez para comunicarse en tierras adoptivas con sus vecinos que hablaban alemán, polaco, letón, lituano, húngaro, ruso, ucraniano, francés, holandés, etc.

El ashkenazi desarrolló una "fusión" lingüística: el yiddish (alemán, hebreo, arameo, además de otras lenguas eslavas y un toque de romance). En su mejor momento - antes de la Segunda Guerra Mundial – el yiddish era hablado por 13 millones de personas. El políglota lenguaje produjo una ejemplar cultura en la literatura, el teatro y el cine.

Hoy los neurólogos reconocen que el aprendizaje de varios idiomas mejora la memoria, la flexibilidad mental, la resolución de problemas, el pensamiento abstracto, y la formulación de hipótesis originales. Las explicaciones de los beneficios abundan; Recomiendo prestar atención al video, "El Bilingüismo Sobrealimenta el Cerebro de su Bebé".

Restringidos a la Brillantez: Entre 800 y 1700 DEC, los judíos de Europa fueron excluidos oficialmente de las ocupaciones "comunes", como la agricultura, De hecho, por lo general no se les permitió poseer tierras. Las restricciones obligaron a los ashkenazim, durante 900 años, a dedicarse a las profesiones urbanas que eran cognitivamente más exigentes, como el comercio, la contabilidad, las ventas y la inversión. La habitual prohibición cristiana contra el cobro de intereses por préstamos de dinero - prohibido como "usura" - ayudó a abrir las ocupaciones bancarias y financieras para los judíos. Los registros históricos revelan que el 80% de los judíos de Roussilon, en el sur de Francia, en 1270, eran prestamistas.

Más tarde, después de que fueran expulsados ​​de Europa occidental, los ashkenazim fueron bienvenidos en Polonia como inversores urbanos e iniciadores del comercio que podrían ayudar a modernizar la nación. También eran muy demandados para puestos de dirección de nivel medio porque tenían habilidades matemáticas y de administración de empresas.

Los askenazíes que no eran, matemática y verbalmente, lo suficientemente versados para tener éxito en estos trabajos de "cuello blanco" se alejaron del judaísmo – los de bajo coeficiente intelectual fueron hechos a un lado. Por el contrario, los comerciantes más exitosos y los contadores formaron familias más numerosas, legando una proporción cada vez mayor de cerebros algebraicos.

Esparcidos Por la Persecución: Los askenazíes más inteligentes y/o ricos estaban mejor equipados para escapar de las inquisiciones, pogromos, persecuciones, holocaustos y otras amenazas genocidas porque: 1) podían permitirse el lujo de emigrar; 2) podían predecir la necesidad de hacerlo; y 3) tenían oportunidades sociales y económicas en los países a los que huyeron. Los ashkenazi más pobres, menos conectados y menos astutos mermaron inexorablemente.

La reiterada aniquilación, expulsión y huida del pueblo judío es universalmente conocida. La primera diáspora de Babilonia ya ha sido mencionada. Una segunda diáspora es comúnmente considerada como una serie de dispersiones desde Israel después del fracaso de las revueltas judías contra el Imperio Romano entre el año 70 DEC hasta 135 DEC. En 629 DEC, el rey Dagoberto de los francos ordenó a los judíos a convertirse, abandonar su tierra o enfrentar ejecución. La Primera Cruzada, 1096-1099 DEC, masacró cruelmente a miles de ashkenazi, un estimado del 25%. Los judíos fueron expulsados ​​de Inglaterra en 1290, de Francia en 1394 y de partes de Alemania en el siglo XV. Los pogromos en el Imperio Ruso, en el siglo XIX y principios del siglo XX, asesinaron a un considerable número de judíos, y el Holocausto, instigado por Adolf Hitler, condujo al genocidio de aproximadamente seis millones, principalmente ashkenazi.

Cuándo y dónde fuere que comenzara la persecución, era más probable que los judíos escaparan si podían pagar su salida, o si eran lo suficientemente ricos como para tener caballos, carruajes, empleados como guardias, parientes ricos a dónde huir, y amigos en "elevados puestos". Frecuentemente, un alto coeficiente intelectual ha sido correlacionado con el éxito económico.

Genio Enfermo: Los askenazíes son presa de alrededor de diecinueve enfermedades genéticas debilitantes, y se ha conjeturado que varias de ellas podrían tener "efectos secundarios" cognitivos que pueden mejorar la inteligencia. Muchos de los trastornos pueden matar o debilitar seriamente a los que tienen dos copias del gen, pero si se hereda sólo una, se obtiene una "ventaja heterocigótica" que puede incluir la promoción del crecimiento de las neuronas y acelerar la interconexión de las células cerebrales. Por ejemplo, tener sólo uno de los alelos de Tay-Sachs y Niemann-Pick - GM2 gangliósido - podría aumentar moderadamente el crecimiento de las dendritas.

Otra dolencia ashkenazi es la enfermedad de Gaucher, que parece promover el crecimiento axonal y la ramificación. Un estudio descubrió que 255 empleados, pacientes de la enfermedad de Gaucher en el Shaare Zedek Medical Centre de Jerusalén, tenían ocupaciones que requieren un coeficiente intelectual superior a 120, y el 15% eran científicos. Otra encuesta de askenazíes con distonía de torsión reveló un coeficiente intelectual promedio de 121.

Entrevisté a Gregory Cochran por correo electrónico; es co-autor del informe de investigación de la Universidad de Utah de 2005, "Historia Natural de la Inteligencia Ashkenazi". En sus palabras, "cualquier estímulo del coeficiente intelectual debido a la enfermedad de Gaucher de menos de 10 a 15 puntos [sería] una ganga [pero] podría ser así de grande para la distonía de torsión: todos los que los han tratado se maravillan de lo agudos que son... [Sin embargo] en nuestra opinión sólo una fracción [del incremento del coeficiente intelectual ashkenazi] se debe a mutaciones particulares como Gaucher". En otra entrevista, Cochran precisó las fracciones como "Uno de cada dos mil askenazi, a lo sumo, porta una mutación de Tay-Sachs y una mutación de Gaucher, las dos más comunes".

Después de residir con vecinos de Europa oriental durante más de un milenio, los ashkenazim no son una etnia aislada. Mientras que muchos observadores sugieren que son 30% europeos, un estudio de la Universidad Emory concluyó que los investigadores "pudieron estimar que entre el 35 y el 55 por ciento del moderno genoma ashkenazi proviene de ascendencia europea".

Pensamiento Positivo - Aubrey Max Sandman, PhD, un ingeniero eléctrico de Londres, me envió un correo electrónico afirmando que la actitud positiva es lo que cuenta, no la genética. Su opinión es que los no judíos no trabajan tan duro como los judíos para alcanzar su máximo potencial.

En la actualidad, el "pensamiento positivo" eleva efectivamente el coeficiente intelectual. Una investigación de 2011 en la Universidad del Estado de Michigan reveló que la "actitud" de un sujeto provoca una diferencia en la inteligencia, porque su actitud determina si reacciona, en relación a sus errores, de forma productiva o auto-destructiva. El informe será publicado en un próximo número de la revista Psychological Science, espero que con los datos específicos graficando los incrementos del coeficiente intelectual.

Jaque Mate: El ajedrez ha sido históricamente una actividad altamente favorecida entre los askenazíes; una revista de 1905 lo describió como el "Juego Nacional Judío". Casi el 50% de los grandes maestros son ashkenazi. Las habilidades visuales, de organización y estratégicas requeridas por el ajedrez desarrollan el precúneo en el lóbulo parietal superior y el núcleo caudado, una parte de los ganglios basales en la región subcortical. Es cierto que estas ventajas no son hereditarias, pero los jóvenes que practican el juego pueden incrementar su almacenamiento de memoria, la planificación estratégica y el coeficiente intelectual.

Información adicional sobre los beneficios del ajedrez se puede encontrar en mi capítulo posterior, "Los Años de la Escuela."

Mentes Melódicas: La música ha sido venerada en las tradiciones religiosas de los judíos durante 3.000 años. Los Klezmer "alcanzaron un nivel muy alto de sofisticación y ornamentación", según el Instituto de Música Judía, y los compositores e instrumentistas ashkenazi contribuyen enormemente a la música clásica occidental (un sitio web de historia declara… "Los Judíos ´Poseen’ el Violín”). ¿Siglos de práctica dieron sus frutos? Hoy los investigadores creen que la formación musical optimiza el desarrollo de las neuronas y mejora la función del cerebro en matemáticas, análisis, memoria, creatividad, manejo del estrés, concentración, motivación y ciencia.

Información adicional sobre los beneficios de la formación musical puede encontrarse en los siguientes capítulos: "Primeros Años" y "Años de Escolaridad".

Familias Acomodadas y Apoyadoras, Con Grandes Expectativas: En el nivel neurológico, el éxito promueve el éxito. La victoria produce un torrente de dopamina, un neurotransmisor que activa la motivación para obtener más logros. Los niños ashkenazi generalmente entienden que son capaces de un alto rendimiento, y son instados a desarrollar sus habilidades para contribuir a la humanidad.

¿Es necesaria una severa disciplina para producir estos resultados? Los ashkenazim han desalentado dar nalgadas a sus hijos; parecen ser suficientes fuertes lazos familiares, estímulo incesante y duro y concentrado trabajo en excelentes instituciones.

También son importantes los ingresos disponibles que les permitan a los hijos estudiar y desarrollarse intelectualmente; la riqueza también permite el acceso a escuelas de élite. Las encuestas indican que los judíos estadounidenses tienen casi el doble de ingresos que los no judíos, además de que tienen 2,5 veces más bienes de capital. ¿El resultado? El judío estadounidense promedio recibe 2,5 años más de educación. Incluso durante la Edad Media muchos judíos eran, en estatus económico, de clase media y alta, una condición que aseguraba una buena educación para sus hijos.

¿El Untermensch Se Va a Otra Parte? Un comentarista judío de más de 40 años de edad, de la ciudad de Nueva York, con la nomenclatura "ASAMATTEROFFACT" me informó que - en su opinión – los ashkenazi que carecen de una gran inteligencia y creatividad terminan sintiéndose inferiores. Él cree que esto a la larga conduce al "untermensch" que se casa fuera de la tribu. Sólo el ubermensch permanece para reproducirse. Su punto de vista fue repetido por otro colaborador - Efox"- quien declaró que los judíos menos inteligentes incapaces de ser su propio "Sacerdote” inevitablemente abandonan el judaísmo para unirse a otra religión.

Rabinos Empáticos - Un comentarista que se identificó como "zeev from jew york city" me informó que muchos rabinos eran "Einsteins de la Empatía" - increíblemente amables, pacientes, cariñosos y comprensivos hacia otros seres humanos. Los "empáticos" de alto nivel afectan a sus congregaciones, haciendo que sus vidas sean mejores y promoviendo sus ambiciones e iniciativas.

En posteriores capítulos ("Primeros Años" y "Años de Escolaridad") analizo los beneficios para el mayor coeficiente intelectual del "Apoyo Emocional" y la "Eficacia de los Maestros" - dos dones que, sin duda, fueron proporcionados por rabinos compasivos.

¿Miedo al Antisemitismo? - El comentarista "Morris Wise", después de leer mi artículo original en el sitio web instapundit.com, expuso una posición paranoica. En su opinión, los judíos son motivados ​​para alcanzar altos éxitos académicos, logros profesionales y riqueza, porque quieren sentirse seguros, protegidos y aislados de los sentimientos anti-judíos de la comunidad exterior. Este punto de vista puede, por supuesto, estar justificado por la larga historia de resentimiento y persecución que los judíos han experimentado.

———————————————————————————————————————————

¡Veinte explicaciones para el alto coeficiente intelectual ashkenazi! ¿Mi opinión? ¿En cuanto al cuádruple? Son posiblemente todos correctos, y valiosos para reflexionar. Sin embargo, los que me parecen más interesantes son los factores "ambientales" que son accesibles a toda la humanidad.

Me pregunto: si los pueblos del mundo, realmente, queremos logros intelectuales de alto nivel, ¿por qué no jugamos al ajedrez con nuestros hijos en las noches, en lugar de arrojarlos a un violento video juego? ¿Por qué no podemos escuchar sus composiciones de música clásica durante el fin de semana, en lugar de instarlos a tener conmociones cerebrales en el campo de fútbol? ¿Un "programa alimentario" no es en realidad una excelente idea, en la cultura estadounidense con su 33,5% de obesidad en adultos? ¿Por qué no les proporcionamos excelentes escuelas, los persuadimos a aprender la gramática extranjera, y los convencemos de creer en sus capacidades y ampliarlas, en lugar de obligarlos a soportar años de mediocridad educativa y sin esperar nada en cambio, sino lo mismo?

Si toda la humanidad adoptara las mejores características disponibles de las culturas exitosas, como la ashkenazi, ¿podríamos, en conjunto, beneficiarnos enormemente? ¿Podríamos aprender más rápidamente, con mayor profundidad y producir mayores maravillas? ¿Nos convertiríamos en destacados en lugar de personas que no desarrollan su potencial?

¿Si promoviéramos conductas de alto coeficiente intelectual para los seres humanos en todas partes, en todo el mundo, todos… nos destacaríamos? ¿Mejores seres humanos?

Traducción de José Blumenfeld